Paneles Solares Valencia

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Tipos de paneles

Puede considerarse que hay tres grandes clases de paneles solares, a saber los fotovoltaicos, los térmicos y los híbridos. Vamos a ver los rasgos definitorios de cada uno de estos modelos.

Panel solar fotovoltaico

Los paneles fotovoltaico de Valencia son el elemento que transforma la energía que procede del sol en electricidad. Con unos costes progresivamente menores, estos paneles se presentan como una interesante propuesta para producir energía eléctrica limpia.

En líneas generales, los paneles solares para casa se componen de células fotovoltaicas, conformadas a base de silicio, que covierten la energía lumínica en fotovoltaica. Esto ocurre cuando los fotones impactan sobre la superficie del panel solar, específicamente, contra el silicio que la integra. Al estrellarse, los fotones empiezan a bombardear de silicio a los átomos. De esta forma, se rompen los electrones, liberando algunos de ellos, que serán los que generen la corriente eléctrica.

Hay varios tipos de paneles fotovoltaicos, atendiendo a la composición de sus células . Así distinguimos entre paneles compuestos por silicio o los que están formados por otros materiales, como los Thin Film o los Orgánicos. Evidentemente, el precio de los paneles solares en Valencia cambiará enormente, en función de cada modelo.

Panel solar térmico

También recibe el nombre de colector solar. Este panel solar flexible permite la transformación de la energía procedente del sol en energía térmica, es decir, en calor. Se pueden usar para la climatización de piscinas, la preparación del agua para uso sanitario, la creación de vapor, etc. También es posible dividirlos en varias clasificaciones. La de mayor importancia práctica es la siguiente:

• De baja temperatura. Alcanzan hasta un máximo de 50ºC. Estos paneles se utilizan principalmente para la calefacción y para el agua caliente sanitaria en los sistemas domésticos.
• De media temperatura. Son similares a los anteriores, pero incorporan una cubierta transparente que evita la pérdida de calor del panel. Gracias a esta cubierta, se puede conseguir que el panel llegue hasta los 90ºC.
• De alta temperatura. Añaden otra cubierta más entre la anterior y el convertidor. Así, se genera un vacío, que permite que la temperatura pueda llegar a los 150ºC. Si eliges comprar estos paneles solares en Valencia, tendrás la ocasión de producir vapor capaz de mover turbinas que permitan la generación eléctrica.

Panel solar híbrido

Se basa en entremezclar los conceptos que definen los dos paneles anteriores. Con las dos tecnologías unidas en un sólo panel, se podrá producir electricidad y calor simultáneamente. Si bien es cierto que todavía se trata de un tipo de panel solar bastante desconocido, su popularidad va en aumento. Se trata de una interesante forma de superar las tradicionales distinciones entre paneles, como la que hace referencia a los paneles solares monocristalinos y el panel solar policristalino.

La ventaja de mayor relevancia de estos estos paneles consiste en la disminución del espacio que hace falta para administrar la energía; al reunir los dos paneles en uno. Por ello, es muy recomendable para los lugares en los que, además de demandarse agua caliente sanitaria, el espacio en cubierta es reducido. Esto puede ocurrir en muchas residencias.

Los mejores paneles solares

Aunque los paneles fotovoltaicos y térmicos comparten muchos rasgos, también tienen muchas diferencias, que hacen difícil elegir los mejores paneles solares. Y no solo en que unos se utilicen para conseguir electricidad, y otros para lograr calor. Otros aspectos, como la demanda, también varían considerablemente. Así, el panel fotovoltaico es utilizado con mayor frecuencia que el térmico. Esto es así porque el fotovoltaico supone un menor desembolso en la factura de la luz. Asimismo, se puede utilizar en las áreas de las zonas que se encuentran aisladas, sin una normalizada cobertura de red eléctrica general.

Por tanto, resulta difícil decidir que tipo de panel es superior. Entre otras razones, porque cada uno está hecho de diferentes materiales. El panel solar fotovoltaico, ya sea un panel monocristalino o policristalino, está compuesto de células fotovoltaicas que, a su vez, están elaboradas a base de silicio. Por su parte, en las placas solares térmicas, el material empleado en su cubierta consiste en un vidrio templado transparente y cromáticamente oscuro. De este modo, se puede captar mejor el calor, así como favorecer el efecto invernadero.

Estas peculiaridades de elaboración conducen a que ambos modelos tengan, incluso, diferentes plazos de duración. Mientras que los paneles solares térmicos suelen tener una vida útil aproximada de 10 años, los paneles solares fotovoltaicos tienen una vida útil de unos 20 años. También es cierto que los paneles térmicos tienden a aprovechar mejor la energía.

Otro aspecto que conviene mencionar es el de la instalación. Si bien es cierto que este factor depende enormemente de la marca y la empresa con que se trabaje, los paneles solares térmicos suelen ser más sencillos de instalar. Los foltovoltaicos, en cambio, tienden a utilizar una infraestructura más difícil de manejar. No obstante, ambos tipos de paneles coinciden en que requieren pocos costes de mantenimiento.

Con todo lo dicho anteriormente, se puede llegar a la conclusión de que no existe, a modo general, un tipo de panel solar mejor que otro. Cada uno resulta apropiado para los objetivos que se pretenden cumplir. Quizás, la mejor forma de disfrutar de las ventajas de los dos modelos es optar por un modelo híbrido.

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